Terminator: destino oculto

Esta semana se estrena una de las películas de las que sus antecesoras marcaron una gran impacto en la época de los 80’s y 90’s, específicamente me centro en las primeras dos por haber sido la revelación de efectos visuales creados por el ingenio de James Cameron y un aporte de la segunda fue ver al gran personaje de Sarah Connor siendo una mujer totalmente diferente y claro “You could be mine” de Guns N’ Roses.

Si bien a lo largo de los años Terminator siguió dando de qué hablar, pues a consideración de esta escritora cada película aporta hechos significativos a su trama. Ahora con "Terminator, destino oculto", tal cual dice su título, encontramos otro significado otro futuro del que Sarah desconoce, una nueva oportunidad y un nuevo salvador.

Como espectadores tenemos dos motivos para alegranos y es por los actores como Arnold Schwarzenegger y Linda Hamilton y el director que dio vida a Terminator, James Cameron, así como Tim Miller quien se dio a conocer por su trabajo en Deadpool, parece el resultado perfecto.

Este tema de máquinas contra mejorados y humanos ya es un pan de cada día en la actualidad en cuestión de entretenimiento, pero no olvidemos que fue Terminator el pionero.

Ambos directores impregnan de valiosos dotes a esta cinta. Otro punto relevante es que ésta como otras películas, han integrado la situación migratoria actual, en este caso centrado en México; debo admitir que llega un momento en que personalmente sentía exageradas las expresiones que se usan para marcar el estereotipo tanto de los mexicanos como de los estadounidenses, como si cada quien ya supiera su rol.

Resulta ser un tema delicado que creo que nadie, ni cineastas ni la misma sociedad podemos definir aún. Es por esa razón que termino estás líneas expresando que a pesar de haber sentido exageradas ciertas escenas, no quiere decir que no se tome en cuenta la intención y que eso no debe quitar las ganas de ver esta película, pues la acción y teoría que maneja valen verla.